Oh, la France!!

Qué cosa, que hasta la France de Sarkozy no esté de acuerdo con el reducto más francés en el exterior. Qué cosa que hasta la France no comprenda a nuestra clase dirigente que tan bien le hicieron los deberes. O ahora vamos a creer que los paracaidistas franceses que asesinaron en Argelia vinieron solitos a Buenos Aires. O ahora vamos a creer que la "escuela francesa" era simplemente un lindo edificio en donde nuestros militares aprendían a decir mercy, au revoir, je t'aime...

Y sin embargo, la Historia, esa loca inexorable, nos trae esto:

Francia se congratula por la apertura hoy (por ayer) en Buenos Aires del juicio de la tristemente célebre Escuela Superior de Mecánica de la Armada (ESMA), en el cual comparecerá el ex capitán Alfredo Astiz. Francia aprovecha esta ocasión para saludar nuevamente la voluntad política de las autoridades argentinas para llevar a bien el conjunto de los juicios de la dictadura.”(Comunicado difundido ayer por el Ministerio de Relaciones Públicas de Francia. La Justicia francesa ya juzgó y condenó a Astiz en ausencia por el secuestro, tortura y desaparición de las monjas Alice Domon y Léonie Duquet.) (en Página 12 de hoy: pirulo de tapa)

Claro, viejo. Una cosa es asesinar, desaparecer, torturar en el exterior (en Argelia, en Vietnam) y otra cosa es que te maten un connacional en esa ciudad tan lejana de París y tan a la mode de la France. Ahí sí que no...

Así que no se gasten. No se gasten los valientes muchachos de la Armada, no se gaste el chacal de Córdoba, no se gaste la Chechu con sus exabruptos. La justicia, sin pausa, lenta,implacable, avanza. Tanto avanza que ya los tiene agarrados de los calzones, ¿vio?

Y no se gasten tampoco con nosotros. Ya los conocemos, ya sabemos de sus provocaciones, ya sabemos que juegan a la desestabilización, ya sabemos que son los profetas que se montan en el descontento, ya sabemos que tienen a sus amiguitos incondicionales dando vueltas incluso en ese lugar que les gustaría ver bombardeado, el Congreso. Ya sabemos bastante, y los conocemos aún más. Así que, simplemente: NO JODAN.