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Alguien me hizo esta observación: "lagente" ejerce la crítica contra el proyecto nacional del gobierno desde el chiste, el chisme, la anécdota de peluquería. Es así:
Cristina llega siempre tarde.
Cristina se la pasa paseando.
Cristina debe tener millones de carteras si se compra un montón en cada viaje.
El viejo cuento de dónde hay que desparramar las cenizas de la Presidenta cuando muera (que no es más que una actualización del chiste que tenía como protagonista a la Rata).
La "benemérita" mete la mano en el ANSES.
La plata del Estado es de todos, pero la mía es mía, que para eso me la gané.
A Cristina la maneja el marido.
A Kirchner lo maneja la mujer.
Kirchner le pega a su mujer.
Cristina lo gritonea a su marido.
Cristina es soberbia.
Cristina es vengativa.
Cristina habla como si viviera en la estratósfera.
Kirchner lo espía a Alberto Fernández.
Kirchner no lo deja hablar al ministro de Economía.
Kirchner se reúne en secreto en los sótanos de la Residencia.
Kirchner compra a los gobernadores con la plata de lagente.
La hija de la Presidenta se quedó en todas las materias porque se la pasa viajando con nuestra plata.
El hijo de la Presidenta tiene un grupo de barrasbravas que lo apoya.
Todos los días hay asados en Olivos, y los pagamos nosotros.
Kirchner y su mujer se roban hasta los floreros de Olivos.
Y lo que dejan, se lo roba Moyano.
El otro viejo chiste de la visita a Suiza, en la que todos se ríen cuando la Presidenta presenta a sus ministros de Educación, Justicia y Salud, porque no existen, como el Ministro de Marina de Suiza.(también actualización del original, si no lo crean vean el libro del Beto Casella en los 90)
Obama la dejó con la mano colgando.
Obama no llama.
Obama llama pero no para felicitarla.
Obama se arrodilla para pedirle perdón a un policía blanco porque es un estadista.
Bachelet y Lula, esos sí que son presidentes dignos.
Uribe también.
La Presidenta no lee los discursos porque quiere ser una maestra ciruela.
No sé por qué viaja tanto, si lo importante está acá.
Qué nos importa Honduras, si queda tan lejos.
Quieren transformarnos en Cuba, o en Venezuela.
Miremos a los países serios, como los europeos.
Los jubilados ganan miserias.
Aerolíneas da pérdida y la pagamos toooodos.
La desocupación está en dos dígitos: que quiere decir un 30% o un 50%, total nadie va a ocuparse de controlar si las cifras son ciertas.
El campo produce y el gobierno se le queda con el 80%.
Cierran 3 tambos por día.
El país es un caos.
Los que hablan a favor están todos comprados.
Los intelectuales de Carta Abierta son empleados del gobierno.
Las facultades delegadas, bah, los superpoderes son propios de una dictadura.
La gripe A mató millones, pero los medios no lo pueden decir.
Nuevito: los Martín Fierro sufrieron el apriete de Kirchner.
La AFA sufrió el apriete de Kirchner.
Nos quieren obligar a cantar la Marchita hasta en las escuelas.
Y el chiste más chistoso de todos: no hay libertad, no se puede hablar...
Lo dijo Nelson Castro. Lo dijo Morales Solá. Lo dijo TNbaum. Por lo tanto es cierto.
¿Realmente a este estado mental nos trajo la década infame? ¿Realmente nos frieron las neuronas de tal puta manera?. Porque la crítica fundamentada, equilibrada, con propuestas, intelectualmente elaborada es necesaria como el agua y el aire. Pero dejémosnos de joder: cualquier émulo de Giordano es analista político; cualquier heredero de Rolando Rivas (perdón, Rolando) pretende formatearnos el mate, convencido de que sus pensamientos son suyos, como su platita; cualquier doña Rosa interpreta la realidad desde la mesa de Mirta; cualquier programa de chimentos da cátedra de pensamiento nacional. ¡¡¡QUÉ GRANDES LOS ENANITOS!!!!!
PD: la más que interesante obra que ilustra el post es de Pablo Andrés Medici (Brocha) y se llama, exactamente: Qué risa, todos lloraban...
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